domingo, 11 de diciembre de 2011

Tócate

Luz suave, temperatura cálida, sábanas moradas, y tú. Tumbada para mí. No puedes esperar más y la impaciencia te quema como te quema el deseo de sexo esta tarde. Me tumbo junto a ti y te observo. Tus manos, que hasta entonces sólo jugueteaban con tu pelo, bajan vertiginosamente hasta esconderse en tu braguita. Allí se inicia la danza de las caricias mientras nos miramos, tú a mi polla, tomando la dureza que buscas; yo a tu braguita, con ese aleteo de manos en su interior.
Es entonces cuando descubres mi cámara de fotos y estallan tus ojos. Comienza el morbo. El nervio. La pose. Te gusta que te fotografíe mientras te tocas, mientras me tocas, cuando follamos, mientras chupas con pasión mi polla, cuando tu coñito humedece entre mis manos, cuando me abres tu culo para que lo mire. Y te imaginas el resultado. Y piensas en el destino de esas fotografías y quién las verá. Te excita pensar que puedan reconocerte y eso eriza tu piel y encoge tus pezones duros.

Ya notas, por ti misma, que mi polla está dura. La acaricias, de arriba a abajo, subes y bajas su piel. Imaginas qué dirían tus amigas de ella si viesen esas fotos. Siempre fuiste muy celosa de mi cuerpo, pero hoy te apetece que lo vean tus amigas. Tus amigas y las mías. Ya planeas cómo colar en alguna conversación con mis compañeras de trabajo la existencia de estas fotos. Te esmeras para que tu mano salga en la imagen, apretando mi polla y estirando al máximo su piel, dejándola libre y húmeda, mientras acercas tu lengua y la dejas ahí, a un centímetro, apenas, consiguiendo una imagen morbosa del momento, que es lo que buscamos. Luego haremos más fotos; con tu mano adentrándose por los pliegues rojizos de tu coño, bañándose en tus fluidos, separando con tus dedos la entrada para mostrar el jugo carnoso de tu sexo. Inventaremos posturas, colocaremos la cámara encontrando ángulos imposibles, mantendremos los cuerpo quietos para inmortalizar la tarde. Por último, veremos las fotos en la tele, sentados uno junto al otro, mientras tú juegas con mis huevos y yo acaricio tus pezones. Y antes de la último foto, volveremos a corrernos.

1 comentario:

  1. Me encanto tu relato...tu si que sabes jugar con tu pareja....mmmm, en alguna ocasión he jugado con una cámara mientras practicábamos sexo y es muy excitante y divertido, claro que tienes que tener muy claro con quien te haces ciertas fotos y luego que hacer con ellas. Yo por si acaso las borre un rato después.

    ResponderEliminar